El pensamiento de Lao Tsé es un método dialéctico simple. En términos de autocultivo, Lao Tzu es el antepasado del cultivo dual taoísta. Enfatiza la modestia y la práctica recta y no compite con los demás. Políticamente, Lao Tzu defiende el gobierno mediante la inacción y la enseñanza a través de las palabras. En política, Lao Tse enfatiza el principio de que las cosas deben revertirse cuando llegan a sus extremos.
Los pensamientos de Zhuangzi pasaron del “Cielo” macroscópico al “Humano”, explorando el mundo interior de las personas. El principio explicado es: el cielo y el hombre son uno, el hombre y la tierra, la tierra y el cielo están por encima de todo. El cielo se refiere a la naturaleza, el Tao y las leyes objetivas, y el hombre se refiere a las cosas hechas por el hombre. Se opone a la artificialidad y propone que las personas se ajusten a la naturaleza. Filosóficamente hablando, la materia es lo primero y la conciencia lo segundo. Este es un punto de vista materialista, pero reduce la iniciativa de la conciencia humana y tiene cierta negatividad. En general, su artículo está bien escrito, es imaginativo e incisivo. Muchas opiniones siguen siendo correctas hoy en día y muchos modismos provienen de Zhuangzi.