Los discursos son muy urgentes y el contenido del discurso también es algo en lo que el orador es bueno y con lo que está familiarizado. Espera atraer a su audiencia a través de historias que generen una perspectiva positiva y valiosa. La audiencia transforma la postura y los puntos de vista del hablante en sus propias prácticas sociales, que afectan y promueven a la humanidad.
El papel promotor del habla es indudable, y no se puede subestimar la función educativa del habla. La razón por la que el habla puede ser una buena forma de educar a las masas es que tiene sus propios medios especiales y su encanto único.
Datos ampliados:
El habla es una práctica social artística y seria con fines de propaganda y agitación. La función estética de un discurso es influir en las emociones de la audiencia con su bello contenido y forma. A través de los discursos audiovisuales, la audiencia recibe la hermosa información difundida por la imagen general del discurso, obteniendo así placer, consuelo y satisfacción espiritual.
El orador escribe su discurso con antelación y lo recita repetidamente. Después de recitarlo, sube al podio. Si no lo escribe, habla al público. Esta forma de hablar es más adecuada para concursos de oratoria y principiantes, y puede probar y desarrollar la capacidad de hablar del hablante hasta cierto punto. Su desventaja es que al orador le resulta incómodo improvisar y hace que el público se sienta artificial. Una vez que olvidas las palabras, es difícil continuar y muchas veces tienes que hacer el ridículo en el acto.