En el proceso de educar a los niños, los padres les dan suficiente espacio para crecer libremente, les permiten aprender a autocontrol, les permiten aprender a tener confianza en sí mismos y a tener autocontrol, y dejan que la pequeña águila crezca libremente y ¡aprende a volar! Todo el mundo desea la libertad. ¡A nadie le gusta estar atado por otra persona! Con libertad, los niños pueden elegir lo que les interesa; los niños practicarán repetidamente y aprenderán a concentrarse y crear orden mediante la práctica repetida.
En el proceso de educar a los niños, los padres les dan suficiente espacio para crecer libremente, les permiten aprender a autocontrol, les permiten aprender a tener confianza en sí mismos y a tener autocontrol, y dejan que la pequeña águila crezca libremente y ¡aprende a volar! Todo el mundo desea la libertad. ¡A nadie le gusta estar atado por otra persona! Entonces, desde cierta perspectiva, los padres deben dejar que sus hijos aprendan y se desarrollen de forma independiente si están interesados en algo cuando son pequeños. Los adultos deben preparar cuidadosamente a los niños y proporcionarles libros sencillos y herramientas experimentales para responder preguntas, permitiéndoles explorar, descubrir, leer y comprender por sí mismos.
Necesitamos darles a nuestros hijos las "Seis Liberaciones": emanciparles la mente y dejarles pensar; soltarles las manos y dejarles ser capaces. Abre sus ojos para que pueda ver. Suelta su boca y déjalo hablar. Libere su espacio para que pueda acudir a la naturaleza y a la sociedad para adquirir más conocimientos; libere su tiempo, no los obligue a apresurarse a realizar los exámenes, déjele aprender lo que desee aprender.