En primer lugar, mi madre no hizo nada malo. Ella simplemente expresó su opinión y le dijo a su hijo que le podían gustar Lisa y su programa, pero que no podía convertir a su madre en Lisa. Esta es una reacción normal, porque mi madre es mi pariente y no puede ser reemplazada por otros.
En segundo lugar, el comportamiento de los niños es irresponsable y perjudicial. Debido a sus emociones e impulsos, decidió romper el cuenco como un acto irrespetuoso para expresar su descontento. Este comportamiento no sólo dañará la madre y el ambiente familiar, sino que también afectará su imagen y sus relaciones interpersonales.
Se aconseja al niño que se calme, reflexione sobre su comportamiento y se disculpe con su madre. Puede expresar sus sentimientos y pensamientos a su madre, pero no debe utilizar la violencia ni la agresión para resolver problemas. Al mismo tiempo, también debe aprender a respetar las opiniones y sentimientos de otras personas y valorar la importancia de la familia y los lazos familiares.