De hecho, cada año se extinguen especies en el mundo. Debido a la destrucción humana, el medio ambiente de la Tierra ha sufrido cambios trascendentales. Si podemos adaptarnos a este cambio, podremos sobrevivir. Si no puedes adaptarte, sólo te queda esperar la extinción. Sumado a la caza furtiva humana y las matanzas aleatorias, la diversidad biológica se ha visto gravemente dañada.
Pero si un gran número de especies se extinguen al mismo tiempo, las primeras en resultar perjudicadas son las criaturas situadas por encima y por debajo de esas especies en la cadena alimentaria. Sus enemigos naturales perderán alimento y es probable que abandonen su hábitat original para sobrevivir; si su alimento pierde enemigos naturales, se multiplicarán salvajemente y ocuparán esta área. Por ejemplo, si la especie extinta fuera un ave que se alimentaba de plagas y que era presa de los buitres, los buitres perderían su alimento cuando el ave se extinguiera. Algunos buitres morirán de hambre, mientras que otros lucharán por sobrevivir y volarán a la ciudad desde el bosque. Los buitres hambrientos atacarán incluso a los humanos, quienes los matarán para protegerse, por lo que los buitres pronto se extinguirán, lo que conducirá a la desaparición paulatina de la cadena alimentaria. Las plagas, por el contrario, no tienen enemigos naturales y el mundo de repente se convierte en su mundo. Pueden disfrutar de sus cultivos y expandirse como locos. Para eliminar estas plagas, los humanos utilizarán una gran cantidad de pesticidas e incluso aviones, lo que desperdicia gente, dinero y energía, y puede tener poco efecto. Lo que es aún más aterrador es que estos pesticidas pueden eventualmente dañar a los propios humanos.
Esto suena terrible. Un desastre tras otro puede parecer alarmista, pero en realidad es el resultado normal de la alteración del equilibrio de la cadena alimentaria de la naturaleza. Por lo tanto, debemos proteger el medio ambiente, la diversidad de especies y el equilibrio ecológico; en última instancia, nos estamos protegiendo a nosotros mismos.