Educación parental: evite estos estilos de crianza desfavorables.

Como iniciadores de sus hijos, los padres tienen un profundo impacto en el crecimiento de sus hijos. Para que los niños crezcan sanamente, los padres deben elegir métodos educativos científicos y razonables. Sin embargo, algunos métodos educativos pueden tener un impacto negativo en el desarrollo de un niño. Este artículo explorará estos estilos de crianza perjudiciales para ayudar a los padres a guiar mejor a sus hijos.

Sobreprotección y supervisión

La sobreprotección y supervisión de los niños puede debilitar el desarrollo del autoconcepto y la autonomía de los niños. Los padres deben seguir el principio de "nunca reemplazar nada de lo que el niño pueda hacer" para cultivar la capacidad de autocuidado de sus hijos.

Amenazar a los niños

Amenazar a un niño puede debilitar su autoconcepto y hacer que se sienta incómodo. Los padres deben evitar el uso de la intimidación para disciplinar a sus hijos, pero deben ayudarlos a darse cuenta de sus errores mediante una orientación razonable.

Obligar al niño a aceptar.

Obligar a los niños a prometer que no volverán a cometer errores no tendrá un efecto positivo. Los padres deben comprender que ni las promesas ni las amenazas son formas eficaces de educar. En cambio, deberían alentar a los niños a admitir sus errores y buscar soluciones que les ayuden a establecer patrones de comportamiento correctos.

Despreciar o menospreciar a los niños.

Menospreciar o menospreciar las palabras y los hechos de un niño dañará gravemente su autoestima y debilitará su autoconcepto. Los padres deben evitar el uso de esas palabras, pero alentarlas y afirmarlas para mejorar la confianza en sí mismos y la autoestima de sus hijos.

Cultivar la personalidad independiente

Al educar a sus hijos, los padres deben prestar atención a cultivar la personalidad independiente de sus hijos, alentar y guiar razonablemente el comportamiento de sus hijos. A través de métodos educativos correctos, los padres pueden ayudar a sus hijos a desarrollar una personalidad saludable y convertirse en personas seguras y capaces.