Una hoja caída le cuenta al mundo sobre el otoño. Siento la sensibilidad del clima mundial a través de una hoja caída, lo que me enamora de la pintura. La vida no es falta de belleza, sino falta de ojos para descubrir la belleza. Me gusta observar en silencio las venas de las hojas, apreciar la danza de las hojas caídas, sentir la timidez de los capullos de las flores y escuchar el arrepentimiento de los capullos de las flores... Mi corazón late con el aliento de la naturaleza y todas las emociones fluyen en mi escritura, dándome La belleza de ese momento dura para siempre.
El abuelo siempre decía que las palabras son como las personas. El texto irregular vuelve torcida a la gente. Si la lectura sirve para absorber conocimientos y la pintura para registrar la belleza, entonces la caligrafía es para el autocultivo. Cuando te calmes, te volverás uno con el pincel en la mano, escribiendo una caligrafía recta trazo a trazo. Esta es una experiencia transformadora. Capacitación continua, mejora continua, la vida está llena de conocimiento. ¡Solo leyendo miles de libros, caminando miles de kilómetros, conociendo a innumerables personas y mejorando constantemente podremos tener una vida verdaderamente significativa!