El amor de padre y el amor de madre son ambos importantes. Algunos padres creen que basta con que la madre acompañe a sus hijos en su crecimiento. De hecho, esta idea es muy errónea. Porque en el proceso de crecimiento de un niño, la educación del padre y la educación de la madre son igualmente importantes, y no hay diferencia entre ambas. En otras palabras, si el padre está ausente cuando el niño está creciendo, el niño también se sentirá muy incómodo. Por ello, los padres deben participar lo máximo posible en el proceso de crecimiento de sus hijos y no estar ausentes.
El amor de padre y el amor de madre son indispensables. Si un niño crece en un entorno sin el amor o el amor de su padre, es probable que la personalidad del niño sea imperfecta. Sin la compañía de su padre, el niño se volverá pasivo y arrogante, tendrá baja autoestima y puede tener algunos defectos de carácter. Sin embargo, sin la presencia de la madre, el niño carecerá de paciencia, cuidado y ternura característica.
Por eso la influencia de los padres sobre sus hijos es muy importante. Si los padres no pueden quedarse con sus hijos a menudo debido a problemas laborales, deben comunicarse con sus hijos a través de videos u otros métodos. Sólo así podremos guiar a los niños a ser mejores y brindarles una infancia mejor.