1. Los padres ignoran las ideas de sus hijos en la educación.
Los padres consideran la educación como su propio amor y tristeza e ignoran por completo los pensamientos de sus hijos. La educación opresiva permite ignorar y negar las ideas de los niños. Sin embargo, este tipo de presión laboral es invisible e intangible, pero hará que los niños se sientan descansados. La idea de no poder ver a los niños se ha convertido en la manifestación más intuitiva de una educación opresiva.
2. Los padres faltan respeto por los rasgos de personalidad de sus hijos en la educación.
Los padres dan vida a sus hijos y los crían, por eso algunos padres sienten que sus creencias pueden trascender a sus hijos. Bajo una educación opresiva, los padres carecen de respeto por sus hijos y los padres no pueden ver la conciencia y la culpa en las espaldas de sus hijos. La conmoción y las acusaciones de los padres son demasiado para que los niños puedan afrontarlas. La esencia de la educación opresiva es la falta de respeto de los padres hacia sus hijos.
3. Los padres son demasiado controladores
La manipulación hace que las personas se sientan seguras, por lo que los padres que están preocupados por la desviación de sus hijos pondrán su deseo de controlar en sus hijos, pensando que esto es correcto. Bueno para los niños, para salvarlos de golpes y golpes. Los padres manipulan el comportamiento de sus hijos para hacerles sentir que su educación está bajo control, pero olvidan que los niños no son muñecos para cerrar la brecha. La educación opresiva hace que los niños se sientan deprimidos y miserables.
2. ¿Qué efectos adversos traerá la “educación opresiva” de los padres?
La Sra. Zhao de Chongqing vino a la estación de policía esa noche para llamar a la policía, diciendo que su hija se había escapado de casa. Cuando la policía se enteró de que el niño tenía sólo 8 años, llamaron a la policía para solicitar una respuesta de emergencia y recuperaron los datos proporcionados por la Sra. Zhao. Ese día, el niño se fue a casa con su boleta de calificaciones en la mano. Cuando la Sra. Zhao vio las malas calificaciones de su hijo en los exámenes, lo criticó. Inesperadamente, las violentas palabras le dieron al niño la idea de salir corriendo. Entonces, el niño dejó una nota "Adiós, mamá". Esto hizo que la Sra. Zhao se preocupara por la seguridad del niño y también lamentara sus errores educativos. Afortunadamente, la policía finalmente encontró a las niñas sin incidentes.
1. Dañar la relación entre padres e hijos.
Cuando los padres brindan una educación opresiva a sus hijos, los niños sentirán mucha presión y se sentirán insatisfechos. Cuando la opresión de los padres excede la capacidad del niño para soportarla, las emociones negativas del niño explotarán. En este momento, la relación emocional entre padres e hijos también se destruirá, y padres e hijos eventualmente estarán en lados opuestos.
2. Dañar la formación del carácter del niño
El carácter de un niño eventualmente se volverá inseguro si está acostumbrado a una educación opresiva. La valoración personal del niño es relativamente baja y siempre se siente mejor que los demás. El niño tiene una personalidad deprimida y negativa y puede incluso carecer de entusiasmo por la vida.
3. Poner en peligro la socialización de los niños
A los niños que están acostumbrados a una educación opresiva les resultará difícil ser comprensivos y tener exigencias estrictas consigo mismos y con los demás. La socialización de los niños se ve afectada hasta cierto punto por la mala educación de los padres. Los niños no pueden sentir la situación de los demás y tienen una capacidad de control emocional débil.