1. Protección del cuerpo: educar a las niñas para que protejan sus cuerpos, como no contactar a extraños casualmente y rechazar comportamientos inapropiados de manera oportuna. .
2. Autoprevención: Enseñe a las niñas cómo tomar medidas de autoprevención, como cuidar bien de sus pertenencias personales, no filtrar información personal a voluntad y evitar actuar solas en lugares inseguros.
3. Educación de género: Educar a las niñas con conceptos correctos de género y conocimientos de educación sexual, hacerles conocer sus cuerpos y derechos y evitar el abuso sexual.
4. Habilidades sociales: enséñeles a las niñas habilidades sociales correctas, como cómo manejar las solicitudes de comunicación de extraños y cómo proteger su privacidad.
Los padres deben no intervenir a la hora de impartir educación sobre seguridad y dar a las niñas autonomía en función de su edad y madurez. Por ejemplo, las niñas más jóvenes deberían recibir más atención y protección, pero las niñas mayores deberían ser liberadas gradualmente para que puedan aprender a protegerse y aprender a pensar de forma independiente. Al tiempo que dan autonomía a las niñas, los padres también deben brindarles orientación y consejos adecuados para ayudarlas a enfrentar los riesgos y desafíos correctamente. Al mismo tiempo, los padres también deben mantener una buena comunicación con las niñas para que puedan buscar ayuda y apoyo de sus padres de manera oportuna cuando enfrenten problemas.