Entonces la acción disciplinaria del docente es positiva porque su punto de partida es bueno.
Aceptación del estudiante
En segundo lugar, el castigo apropiado no debe exceder el límite superior de la resistencia física y mental del estudiante.
Quizás tu punto de partida sea bueno, pero si el castigo que le das a un alumno excede el límite de lo que su cuerpo y mente pueden soportar, se convertirá en castigo corporal y castigo corporal disfrazado.
Por ejemplo, dejemos que una niña que acaba de entrar en segundo grado corra diez vueltas en el patio de recreo.
Este tipo de castigo corporal ha superado la condición física de la pequeña y superado el límite de lo que puede soportar.
Así que el castigo se convirtió en castigo corporal.
Este estudiante cometió un gran error. Por ideas educativas, el maestro lo golpeó en todo el cuerpo con un gran palo hasta dejarle la nariz magullada y la cara hinchada.
Entonces este tipo de castigo corporal excede el límite que los estudiantes pueden soportar y se considera castigo corporal.
Además, golpear, patear, abofetear y obligar a los estudiantes a ponerse en cuclillas durante una hora, hacer cientos de flexiones y copiar tareas docenas de veces son castigos corporales y emocionales sin sentido.
No considere el límite superior de resistencia de los estudiantes y no considere si esto tendrá un buen efecto educativo.
Comunicarse y coordinarse con los padres
El último paso es, naturalmente, comunicarse con los padres.
Cada padre tiene expectativas diferentes para sus hijos en la escuela y los profesores.
Algunos padres quieren que sus hijos estén seguros.
Algunos padres esperan que los profesores puedan castigar a sus hijos dentro de los límites adecuados cuando cometen errores.
También hay algunos padres que ponen el palo de la violencia en manos de los profesores y les dicen que golpeen lo más posible a sus hijos si son desobedientes.
Para saber cuánto castigo pueden imponer, los profesores necesitan comunicarse y coordinarse con los padres.
Si un padre sólo puede aceptar cinco palmadas con un palo en la palma de la mano de su hijo, entonces no puede imponerle un castigo más grave.
Incluso si se requiere un castigo más severo, intente obtener el consentimiento de los padres.
Después de todo, la educación actual no es sólo educación unilateral en las escuelas, sino también combinada con la educación familiar.
Los docentes no deben estar centralizados.
Resumen
En definitiva, si un alumno comete un error y el profesor quiere castigarlo, debe hacerlo bajo las orientaciones de la educación, dentro del alcance que el alumno pueda soportar. , y dentro del alcance que los padres puedan aceptar. Dentro del alcance, castigar a los estudiantes adecuadamente sin dañar su salud física y mental.
Esto no evitará por completo todos los casos especiales.
Pero puede desempeñar un papel mejor en la mayor medida: educar a los estudiantes, no dañar la salud física y mental de los estudiantes y, al mismo tiempo, ser aceptable para los padres.