Los mejores métodos y experiencias en la educación de los niños

Los mejores métodos y experiencias en la educación de los niños son los siguientes:

1.

Los peces de colores tropicales que se mantienen en la pecera miden tres pulgadas de largo. No importa cuánto tiempo se mantengan, el pez de colores nunca crece. Sin embargo, si pones este tipo de pez dorado en un estanque, el pez dorado original de tres pulgadas puede crecer hasta un pie en dos meses.

Lo mismo ocurre con la educación de los niños. Los niños necesitan espacio libre para crecer. La protección de los padres es como una pecera. Los niños nunca se convertirán en peces grandes en la pecera de sus padres.

Si quieres que tus hijos crezcan sanos y fuertes, debes darles espacio para moverse libremente y no dejar que se limiten a una pequeña “pecera” proporcionada por sus padres. A medida que la sociedad progresa y el conocimiento aumenta, los padres deben controlar sus propios pensamientos e impulsos y dar a sus hijos espacio para crecer libremente.

2. La ley de la naturaleza del lobo.

Los lobos son los animales más curiosos del mundo. No dan nada por sentado, sino que tienden a estudiarlo y experimentarlo personalmente. El misterio y la novedad de la naturaleza siempre sorprenden a los lobos. Los lobos siempre están interesados ​​en el entorno que los rodea, para poder seguir encontrando alimento en el entorno, comprender los peligros y sobrevivir de forma eficaz.

Por lo tanto, para cultivar la súper capacidad de aprendizaje de los niños, debemos cultivar su curiosidad por el mundo, dejarles observar la vida con atención y utilizar su interés como maestro para su aprendizaje. Estos niños seguirán teniendo nuevas ideas e inspiración para trabajar en sus vidas futuras.

3. Efecto del viento del sur.

El viento del norte y el viento del sur hicieron una apuesta para ver quién era más fuerte y decidieron competir con quién podía quitarle el abrigo a un peatón. No importa cuán fuerte sea el viento del norte, los peatones simplemente se aprietan más y más la ropa, mientras que el viento del sur sopla suavemente y la gente tiene tanto calor que se abren los abrigos;

El efecto del viento del sur le dice a la gente: la tolerancia es una fuerza más fuerte que el castigo. Lo mismo ocurre con la educación de los niños. Los padres que critican ciegamente a sus hijos acabarán descubriendo que sus hijos son cada vez más incapaces de escucharlos.

Todos los niños pueden cometer errores. Los padres deben tolerar los defectos de sus hijos, abordar los diversos problemas que surgen en la vida diaria de manera objetiva, racional y científica, siendo considerados con sus hijos, y deben comenzar a cultivarse por sí mismos. ellos mismos, para educar mejor a los niños.