2. Evaluar los planes de control existentes para determinar si se cubren los requisitos de cumplimiento legal y regulatorio.
3. Si los elementos de cumplimiento legal no están cubiertos en el plan de control existente, es necesario desarrollar nuevos controles para garantizar el cumplimiento. Estos controles pueden incluir capacitar a los empleados, establecer procedimientos de auditoría interna y establecer políticas de cumplimiento.
4. Integrar nuevos controles en los planes de control existentes. Asegúrese de que cada control tenga un propietario y un plan de implementación claros y esté coordinado con los procesos y procedimientos existentes.
5. Una vez implementado el plan de control, los usuarios deben monitorear y revisar periódicamente su efectividad. Esto se puede hacer mediante auditorías internas, evaluaciones de cumplimiento o auditorías de terceros.
6. Con base en los resultados del monitoreo y revisión, mejorar continuamente el plan de control para garantizar que siempre cumpla con los cambios en las leyes, regulaciones y requisitos de cumplimiento.