Detener el lenguaje grosero a tiempo
Cuando un niño usa lenguaje grosero, el padre debe detenerlo a tiempo. Las madres deben adoptar una actitud severa, señalar claramente los errores y dejar que los niños comprendan que decir malas palabras no sólo traerá malas consecuencias, sino también faltar el respeto a los demás.
Sembrar las semillas del amor
Para crear un ambiente familiar cálido y armonioso, debemos cuidarnos unos a otros y tratarnos como iguales. Siembra las semillas del amor en los corazones de los niños y déjales sentir el profundo amor de sus padres.
Paciencia y métodos
Educar a los niños requiere paciencia y métodos. No seas grosero ni grosero, comunícate y guía con paciencia a tus hijos, y métete realmente en sus corazones. Hazte amigo de tus hijos y ayúdalos a corregir sus malos comportamientos.
Establece reglas
En los niños pequeños, la capacidad de autocontrol es limitada, por lo que establecer reglas es muy importante. Deje que sus hijos consideren las consecuencias antes de hacer algo, lo que les ayudará a aprender a controlar sus impulsos y comportamientos.
Comunicación igualitaria
Comunicarse con los niños por igual y hacerles saber que padres e hijos son iguales en la familia, pero los padres tienen la última palabra en algunas cuestiones. Esto ayuda a cultivar la personalidad independiente de los niños y promover su crecimiento y progreso.
Más ánimo, más apoyo y más elogios.
En la vida diaria animar, apoyar y elogiar más a los niños y evitar menosprecios, sarcasmos y sarcasmos. Esto ayuda a los niños a desarrollar confianza y afrontar mejor los desafíos.
No mimes a tus hijos
No mimes a tus hijos. Deja que tus hijos se den cuenta de que no lo son todo en la familia. La satisfacción moderada puede hacer que los niños se sientan felices, mientras que las exigencias excesivas pueden hacer que los niños se sientan decepcionados.
Predicar con el ejemplo
Como padres, debemos predicar con el ejemplo y dar un buen ejemplo. Todo lo que diga y haga tendrá un impacto sutil en sus hijos. Si queremos que nuestros hijos sean grandes personas, primero debemos hacer esto.