Da un buen ejemplo
Como padre o tutor, tus acciones sirven como modelo a imitar por tus hijos. Asegúrese de que sus palabras y acciones reflejen los principios de honestidad, respeto y cooperación y dé un buen ejemplo a sus hijos.
Cultivo de un corazón agradecido.
En las conversaciones diarias, anime a los niños a expresar su gratitud a los demás y hágales darse cuenta de que lo que otros han dado y lo que ellos tienen se lo han ganado con esfuerzo.
Pequeños expertos en tareas domésticas
Deje que los niños participen en las tareas del hogar, experimenten la dificultad de dirigir una familia y cultiven un sentido de responsabilidad y compasión.
Experimentar "dar" personalmente
Participar en actividades benéficas o trabajos voluntarios, para que los niños puedan sentir la alegría de ayudar a los demás y comprender la importancia de respetar y cuidar a los demás.
El esfuerzo merece ser visto.
Cuando los niños se esfuercen, bríndeles elogios y afirmaciones oportunas para ayudarles a desarrollar su autoestima y confianza.
Corrigir el mal comportamiento con prontitud.
Señale la conducta de exigencia excesiva del niño con tacto pero con firmeza y explíquele los motivos, para que comprenda la importancia de la exigencia moderada.