Las tijeras para uñas fueron inventadas por el estadounidense Voss Kier en los años 30.
El principio se adopta de la "lima de tijera", que es un principio de palanca muy simple. En el pasado, cuando no existían cortaúñas, las uñas largas se cortaban con tijeras o se afilaban y eran un invento conveniente que beneficiaba a la humanidad.