En una sociedad económica basada en el conocimiento, su manifestación específica es: la sabiduría humana y la innovación se invierten en la red de circulación económica del mercado ligada a la moneda, formando recursos humanos y recursos no humanos (materiales, moneda, etc.) .) contrato especial de mercado. ), entre los cuales * * * asume los riesgos de la empresa y * * * disfruta de los intereses de la empresa, convirtiéndose así en el recurso más importante de la empresa. Tratar los recursos humanos e intelectuales como recursos económicos valiosos y enfatizar el valor del conocimiento. La sabiduría y la innovación humanas, una especie de trabajo intelectual, pueden transformarse en estrategias e ideas independientes y luego formar varios diseños innovadores. Invención, creación, gestión de organizaciones, etc. , sus estereotipos forman un activo único y único: un activo humano. En comparación con los activos tangibles tradicionales (materias primas, fábricas, equipos, moneda, etc.). ), estos activos pueden desempeñar un papel incomparable y aportar un enorme valor añadido y riqueza, de modo que el desarrollo de la economía de mercado ya no dependa de los recursos, sino que se transforme en una economía dependiente del conocimiento que se basa en el desarrollo del conocimiento humano. Sabiduría y capacidad de innovación. Cabe señalar que si bien se ha vuelto de sentido común la afirmación de que los recursos humanos son los recursos más importantes en la gestión empresarial, desde una perspectiva contable y partiendo de conceptos básicos como el de activo, es necesario romper conceptualmente los recursos humanos como activo. Las principales razones son las siguientes:
1.
Cuando las personas se enfrentan a cualquier cosa, tienen tendencias subjetivas y opciones de ser positivo o negativo, de actuar o no actuar. Esta autonomía conduce a un control incompleto de los recursos humanos por parte de las empresas. Para los proyectos de activos tradicionales, las empresas no sólo tienen derecho a controlar su producción y utilidad, sino que también tienen derechos de propiedad completos, como la posesión, el uso, los ingresos y la disposición de los propios activos específicos. En cuanto a los recursos humanos, lo que cualquier empresa puede controlar es sólo el producto solidificado de sus conocimientos o habilidades, es decir, los frutos del trabajo.
2. La relación esencial entre trabajadores y empresas es una relación contractual de transacción, no una relación de propiedad. La duración del contrato laboral es muy incierta.
Desde la perspectiva de la empresa, su control sobre la eficacia de los recursos humanos y la posesión de los intereses correspondientes son sólo temporales. Entre los muchos factores que constituyen la rentabilidad general de una empresa, la naturaleza y características de los recursos del arrendamiento operativo son muy similares a los recursos humanos. Para el primero, la contabilidad financiera no lo incluye en el alcance de los activos corporativos.