Cultivo de verdaderas habilidades
Bajo la sobreprotección de los padres, muchos niños se vuelven egoístas, insensibles y dependientes. La educación cruel no sólo puede ayudarlos a comprender de antemano la crueldad de la sociedad, sino también a cultivar sus verdaderas habilidades y permitirles enfrentar los desafíos de la vida con valentía.
Distinguir entre el bien y el mal
La capacidad de distinguir el bien del mal es muy importante para el crecimiento de los niños. Los niños necesitan saber qué es bueno y qué es feo, qué está bien y qué está mal. De esta manera, cuando enfrentan reveses en la vida, pueden tener una visión correcta del bien y del mal como apoyo y responder positivamente en lugar de hundirse en la negatividad.
Ayudar a los demás
Ser amable con los demás también es una parte importante de la educación. Enseñar a los niños a sembrar bondad no sólo les permite ganar paz interior y estabilidad, sino que también les permite hacer más buenas obras frente a la sociedad y a los demás, en lugar de dañar maliciosamente a los demás.
Hacer amigos positivos
Hacer amigos con personas positivas también es clave. Rodéate de gente feliz y tú también serás feliz. Al hacerse amigos de personas igualmente positivas y felices, los niños pueden sentir más energía positiva de los demás. De esta manera, incluso si encuentra dificultades en la vida, podrá tener un grupo de buenos amigos que lo ayudarán a salir de las sombras y ganar nuevo coraje y fuerza.