El ejercicio comienza desde pequeños.
En Rusia los niños conocen la importancia del deporte desde pequeños. La natación, el esquí, el fútbol y otros deportes no son sólo su vida diaria, sino también un arma mágica para desarrollar un cuerpo fuerte.
Respeta la individualidad y deja de lado tus intereses.
Los padres rusos saben que cada niño es único. Animan a sus hijos a perseguir sus propios sueños en lugar de seguir ciegamente las expectativas de sus padres. Aquí se respetan y cuidan plenamente los intereses y pasatiempos de cada niño.
Crecimiento independiente y toma de decisiones independiente
En las familias rusas, los padres creen que es muy importante cultivar la independencia y autonomía de sus hijos. Desde ordenar la habitación hasta lavar los platos, estas tareas aparentemente simples en realidad entrenan el pensamiento independiente y el sentido de responsabilidad de los niños.
Práctica social, entrenamiento de habilidades
Los rusos conocen la importancia de la práctica social. Animan a los niños a participar en actividades de voluntariado, pasantías y otras actividades para que puedan practicar habilidades sociales y de trabajo en equipo en un entorno social real.