Realizar el gran rejuvenecimiento de la nación china es el mayor sueño de la nación china en los tiempos modernos. Para hacer realidad este sueño, innumerables personas con elevados ideales perseveraron, lucharon valientemente y llevaron a cabo luchas épicas. La rebelión Taiping, el movimiento reformista de 1898, la rebelión de los bóxers y la revolución de 1911 se sucedieron una tras otra, y se introdujeron varios planes de salvación nacional, pero todos terminaron en un fracaso.
La razón radica en la falta de un líder que realmente pueda conducir a la nación china a lograr un gran rejuvenecimiento. En el gran despertar del pueblo chino y de la nación china, y en la estrecha integración del marxismo-leninismo y el movimiento obrero chino, nació el Partido Comunista de China.
Un siglo de lucha ha creado un proceso histórico irreversible;
Durante los últimos 100 años, el Partido Comunista de China ha llevado al pueblo chino a realizar esfuerzos incansables en la revolución de nueva democracia. Se han logrado grandes logros en los cuatro aspectos de la revolución y construcción socialistas, la reforma y apertura y la modernización socialista y el socialismo con características chinas en la nueva era, impulsando el gran rejuvenecimiento de la nación china hacia un proceso histórico irreversible.
La Guerra del Opio de 1840 redujo gradualmente la China moderna a una sociedad semicolonial y semifeudal, y la nación china sufrió un sufrimiento sin precedentes. Para salvar al país del peligro y la crisis nacional, surgieron sucesivamente varios partidos, doctrinas e ideas, pero todos terminaron en fracaso. En ese momento, China "necesitaba urgentemente nuevas ideas para liderar el movimiento de salvación nacional y nuevas organizaciones para unir las fuerzas revolucionarias".