Los niños que suelen decir “pienso, pienso” así son los más inteligentes. No sólo lo utiliza para pensar, sino que también se atreve a expresar sus ideas únicas. Estos niños tienen la capacidad de pensar de forma independiente y tener su propia comprensión de las cosas. Cuando crezcan, podrán distinguir el bien del mal, el amor y el odio, y tendrán más opciones para planificar sus vidas en su conjunto. Esperamos que los padres de estos niños apoyen los pensamientos de sus hijos, presten atención al impulso de sus hijos de expresarse y les brinden muchas buenas oportunidades para expresar sus sentimientos.
2. Sigue preguntando "por qué" Quizás tengas un hijo que pregunta a menudo "por qué". Siempre han mantenido una gran curiosidad por el entorno y el mundo, tienen una imaginación especial y dan a la gente la necesidad de aprender cosas nuevas. Pueden ser silenciosos e introvertidos, o pueden ser animados. Una cosa que tienen en común es que les encanta preguntar "por qué". Al igual que "Cien mil por qué", siempre salen de sus bocas una serie de preguntas grandes y pequeñas.
De hecho, todos estos niños crecen en el "período de comprensión". Los niños no saben nada sobre el mundo y están llenos de curiosidad por el mundo. No saben mucho y no pueden engordar de un bocado. Por lo tanto, los padres deberían tener más cuidado al enfrentar los problemas “enciclopédicos” relacionados con sus hijos. Tener una inocencia infantil es un tipo de satisfacción único.
Los niños que preguntan a menudo "por qué" son inteligentes. Simplemente anhela nuevos conocimientos. Había tantas cosas que no entendía. Quiere pensar activamente mediante la comprensión, la exploración, la búsqueda de respuestas y la formulación de preguntas. Esto también es un signo de inteligencia.
Los niños que suelen preguntar "por qué" tienen una amplia gama de pasiones. Les apasiona la vida y se atreven a explorar cosas nuevas. Si se les da una forma cuidadosa, también tendrán una creatividad e imaginación más diversas. Espero que estos padres infantiles puedan estar bien preparados para explorar las alegrías de la vida con sus hijos, dejarles mucho espacio para que imaginen y guiarlos correctamente para que encuentren las respuestas que quieren saber en su vida diaria.