Los científicos aislaron rápidamente el nuevo coronavirus SARS-CoV-2 que causa la enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19). Desde entonces, los científicos han utilizado una serie de secuenciaciones genéticas para rastrear el origen del virus.
La investigación muestra que el nuevo coronavirus tiene una gran similitud de secuencia con un coronavirus en murciélagos (96), lo que significa que es probable que los murciélagos sean el huésped natural del nuevo coronavirus. Sin embargo, los coronavirus en los murciélagos son relativamente primitivos y todavía están genéticamente alejados de los humanos. Todavía necesitan mutar a través de un huésped intermediario antes de poder infectar a los humanos. Los posibles huéspedes intermedios actualmente conocidos incluyen serpientes, visones, pangolines y tortugas.
Entonces, ¿mutará más el nuevo coronavirus?
Los virus pueden mutar mediante diversos mecanismos. Los genomas virales pueden sufrir reordenamientos, lo que puede permitir que los virus recién replicados exhiban características diferentes a las de la generación anterior. Además, las bases del material genético del virus mutarán aleatoriamente, y este fenómeno de deriva genética también provocará la mutación del virus.
El nuevo coronavirus es un virus ARN (monocatenario de cadena positiva). Su material genético es ARN, que se encuentra envuelto en una envoltura compuesta de proteínas. En comparación con los virus de ADN, los virus de ARN son menos estables porque el ARN es más propenso a errores durante la replicación, por lo que los virus de ARN son más propensos a sufrir mutaciones genéticas.
Los nuevos coronavirus no existían antes; mutaron a partir de otros coronavirus. Los coronavirus originales pueden haber acechado en los murciélagos, donde los mecanismos inhibían su actividad. Los murciélagos infectan los coronavirus a huéspedes intermediarios y luego sufren una mutación genética para convertirse en nuevos coronavirus. Tienen la capacidad de invadir las células humanas. En otras palabras, las mutaciones ya se habían producido antes de la aparición del nuevo coronavirus.
Investigaciones recientes muestran que el nuevo coronavirus puede desarrollar aún más mutaciones genéticas. Científicos de la Universidad de Sao Paulo en Brasil compararon 127 genomas completos del nuevo coronavirus de 17 países diferentes. Los resultados preliminares del análisis genético muestran que hay tres mutaciones en el genoma del nuevo coronavirus que apareció en Brasil y son diferentes a las del país. Europa es el genoma del nuevo coronavirus más cercano [1].
Por otro lado, según un estudio recién publicado por científicos chinos [2], el nuevo coronavirus tiene 149 puntos de mutación, la mayoría de los cuales aparecieron en el período reciente. No sólo eso, el nuevo coronavirus también ha evolucionado hacia dos subtipos, a saber, el subtipo L y el subtipo S.
El análisis muestra que los dos subtipos tienen diferente transmisibilidad, y el subtipo L parece ser más fuerte. El subtipo S es más antiguo y más cercano a los coronavirus relacionados con los murciélagos en el árbol evolutivo.
Sin embargo, el estudio analizó sólo 103 muestras. Estadísticamente hablando, el tamaño de la muestra es muy pequeño. La evolución del nuevo coronavirus sólo podrá conocerse mediante más investigaciones. Referencias
[1] Jaqueline Goes de Jesus, Claudio Sacchi, Ingra Claro, et al., Primer informe de COVID-19 en Sudamérica, Virológico, 2020.
[2 ] Xiaolu Tang, Changcheng Wu, Xiang Li, et al., Sobre el origen y la evolución continua del SARS-CoV-2, National Science Review, 2020, nwaa036.