La diferencia entre supervisión y supervisión administrativa en la industria de licitaciones

El mecanismo de (1) es diferente. La supervisión administrativa es una restricción externa obligatoria impuesta por el gobierno al comportamiento de las entidades licitadoras a través de normas administrativas, instrucciones, inspecciones, sanciones y otros medios de acuerdo con las políticas legales. La autodisciplina de la industria es la restricción del comportamiento propio de las entidades licitadoras y sus empleados en el mecanismo de controles y equilibrios internos construido por organizaciones autorreguladoras;

(2) Acciones en diferentes niveles. Con la transformación de las funciones gubernamentales, la supervisión administrativa se centra en los niveles macro y general, restringiendo principalmente los comportamientos comunes y sobresalientes de las entidades del mercado. La autodisciplina de la industria consiste en implementar el nivel de supervisión macro del gobierno al nivel de supervisión micro de empresas e individuos, y supervisar y restringir las conductas profesionales específicas de todas las empresas y sus empleados. Al mismo tiempo, las organizaciones autorreguladoras de la industria pueden brindar servicios de consultoría para la toma de decisiones gubernamentales, ayudar al gobierno a fortalecer la coordinación general de la industria y salvaguardar los intereses generales y a largo plazo de la industria de acuerdo con la ley;

(3) Diferentes formas de actuación. La supervisión administrativa restringe principalmente el comportamiento de las entidades licitadoras mediante legislación, aplicación de la ley y sanciones ilegales. La autodisciplina de la industria utiliza principalmente orientación institucional, capacitación y educación, advertencia y prevención, comunicación y coordinación, supervisión e inspección, corrección y control, sanciones por infracciones y otros medios para implementar restricciones de proceso completo, de múltiples enlaces y de múltiples vías en el comportamiento de las entidades licitadoras;

(4) Los efectos son diferentes. Las acciones regulatorias administrativas son obligatorias, autoritarias y disuasorias. Sin embargo, frente a entidades de mercado extensas, complejas y dinámicas y sus comportamientos de mercado, a menudo carecen de pertinencia, operatividad y oportunidad. Los costos de aplicación de las regulaciones administrativas son altos y la eficiencia es baja. . La autodisciplina de la industria puede aprovechar plenamente el papel de la supervisión social para detectar problemas en el orden del mercado lo antes posible. Al mismo tiempo, podemos tomar medidas de autorregulación tales como orientación, coordinación, inspección, corrección y formulación de las correspondientes normas industriales de manera oportuna en función de las condiciones reales del mercado y de las empresas y los motivos de las violaciones y de conformidad con con leyes y políticas para ayudar a las empresas y a los individuos a reflexionar y resolver eficazmente las demandas relevantes que inducen violaciones y cuestionamientos. Sin embargo, la autorregulación de la industria debe estar respaldada por una supervisión administrativa y judicial. La autodisciplina de la industria y la supervisión administrativa deben combinarse y complementarse entre sí para que la macrogestión y la microgestión se complementen para mantener y estandarizar eficazmente el orden del mercado de licitaciones.