Galia era el nombre de una tribu celta que vivía en la actual Francia, Bélgica, el norte de España, los Países Bajos y el oeste de Alemania. Durante el Imperio Romano, los galos fueron conquistados por los romanos e incorporados al Imperio Romano.
Los francos, en cambio, eran una rama del pueblo germánico. Originalmente vivían en las llanuras cercanas al Rin y su desembocadura, y más tarde derrotaron a los restos romanos en la Galia. Bajo el liderazgo de Clodoveo, establecieron el Reino franco.
En general, los galos eran principalmente celtas, mientras que los francos eran germánicos. Ésta es la principal diferencia histórica y cultural entre las dos naciones diferentes.