La llamada teoría de la dilatación del tiempo significa que el tiempo y el espacio no son independientes, sino que están estrechamente relacionados. El tiempo y el espacio pueden formar una unidad superior llamada espacio-tiempo, porque el tiempo puede formar espacio, tiempo y espacio, lo que significa que el tiempo puede cambiar en diferentes direcciones como el espacio, en lugar de en una dirección fija. Einstein creía que el tiempo cambia con la velocidad de un objeto. Cuanto más rápida es la velocidad, más lento es el tiempo.
Cuando la velocidad alcanza la velocidad de la luz, el tiempo se detiene. Al viajar más rápido que la velocidad de la luz, el tiempo puede retroceder. Cuando Einstein propuso esta teoría por primera vez, la gente pensó que era una falacia. ¿Cómo podría detenerse el tiempo y mucho menos ir contracorriente? Por eso todos dicen que la teoría de la dilatación del tiempo es una teoría errónea. Sin embargo, con el paso del tiempo, los científicos demostraron que esta teoría era correcta. Necesitamos entender que las imágenes de cualquier cosa que vemos habitualmente son en realidad imágenes históricas de estas cosas.
Debido a que todo se transmite a nuestros ojos a través del reflejo de la luz para formar un retrato, existe una distancia entre las cosas y los ojos, lo que marca la diferencia entre la imagen de lo que vemos y lo real. Imagen horaria de la cosa Hay una diferencia horaria. Entonces, vemos la historia de las cosas, no el presente ni el futuro. Por ejemplo, cuando miramos flores, en realidad las consideramos cuadros históricos. Sin embargo, no podemos ver las flores en tiempo real porque nuestros ojos están siempre alejados de ellas.