El contenido formativo del personal de servicios de catering suele incluir los siguientes aspectos: conocimiento del producto, habilidades de servicio, habilidades de comunicación y coordinación, trabajo en equipo y gestión de la relación con el cliente.
En primer lugar, los formadores deben tener un conocimiento profundo de los productos de catering ofrecidos, incluidos menús, ingredientes, métodos de cocción, etc.
Necesitan aprender información importante como las características, sabores, fuentes de ingredientes y alérgenos potenciales de cada plato para poder ofrecer presentaciones de productos y recomendaciones precisas a los invitados.
En segundo lugar, las habilidades de servicio son uno de los contenidos clave en la formación.
Esto incluye el desarrollo de habilidades como la cortesía, la recepción profesional y la comunicación efectiva. Los formadores deben aprender a recibir a los huéspedes de forma cálida y amigable, a escuchar y comprender sus necesidades y a poder ofrecer una experiencia de servicio de alta calidad.
Las habilidades de comunicación y coordinación también son el foco de la formación.
El personal del servicio de catering debe aprender a comunicarse eficazmente con compañeros y superiores, así como a interactuar bien con los huéspedes. Deben aprender a adaptarse a diferentes estilos interpersonales, manejar las quejas y problemas de los huéspedes y ser capaces de coordinar los procesos de trabajo de manera eficiente.
Además, la formación se centra en el trabajo en equipo y la gestión de la relación con el cliente.
Las operaciones de catering a menudo requieren que varias personas trabajen en estrecha colaboración, por lo que los alumnos deben aprender a trabajar eficazmente en equipo, coordinar y resolver problemas. Al mismo tiempo, también deben aprender a establecer y mantener buenas relaciones con los clientes, brindar servicios personalizados y ser buenos manejando las quejas y opiniones de los clientes.