Después de leer el collar

1. Después de leer "El collar" de Maupassant, quedé profundamente conmovido. Se escribe esta novela: Mathilde Loselle era una mujer sencilla Un día recibió una invitación a una fiesta, pero no sabía qué ponerse. Entonces, su esposo le pidió que le prestara joyas en la casa de una amiga. Pidió prestado un collar de diamantes y causó sensación en la fiesta. Sin embargo, cuando regresó a casa, el collar había desaparecido.

2. Buscaron por todos lados y no encontraron nada. Más tarde vi un collar idéntico en una tienda. Pero el comerciante dijo que les daría treinta y seis mil francos. Para el collar, comenzaron a pedir dinero prestado hasta que pidieron prestado suficiente dinero, compraron el collar y se lo devolvieron a su amigo. Para saldar la deuda, despidieron a la criada y se mudaron. Mathilde Loser empezó a intentar hacer las tareas del hogar y su marido empezó a ayudar a los empresarios a copiar cuentas para ganar dinero. Diez años después, finalmente saldaron la deuda. Después de contárselo alegremente a su amiga, Mathilde Loser descubrió que el collar que su amiga le había prestado era falso y valía como máximo quinientos francos.

3. También se puede decir que este accidente es una coincidencia inevitable. El evento devuelve a la anfitriona a la realidad. Esta realidad es cruel: requiere que trabajes duro para lograrla; requiere que sacrifiques tu hermosa apariencia; requiere que estés agotado mental y físicamente; Sin embargo, también te da ricas recompensas: la vida de la heroína se enriquece gracias a esto; ella y su marido están en armonía financiera y disfrutan de la dulzura del otro; en resumen, ella no es rica materialmente, pero ha ganado la verdad en su alma; . Sin duda, Maupassant nos está contando un hecho con una lección aparentemente cruel: una historia que pasa de impetuosa a verdadera. Pero el precio fue demasiado alto, fueron necesarios diez años de sudor y penurias.

4. No debemos perseguir este tipo de cosas falsas que no nos pertenecen, sino que debemos tener los pies en la tierra para hacer una carrera y crear algo que nos pertenezca a través de la lucha.