1. La cláusula de objeto se coloca después del verbo transitivo o preposición y sirve como objeto del verbo o preposición. Hay conjunciones (que, si, cuándo), pronombres de enlace (qué, cuál, quién, quién, etc.) y adverbios de enlace (cómo, cuándo, dónde, por qué, etc.) que conducen a cláusulas de objeto. Por ejemplo:
Sé que está enfermo.
¿Puedes decirme dónde vive?
No sé si irá.
No sabemos de quién es esta billetera.
Tom está interesado en lo que tienes que decir.
Nota: las cláusulas that o if no suelen usarse como objeto de una preposición (excepto). Por ejemplo:
No estoy seguro de adónde va.
La casa es preciosa, aunque un poco pequeña.
2. La cláusula atributiva se coloca después del sustantivo o pronombre que se modifica y se utiliza como cláusula atributiva para modificar el sustantivo anterior en la oración. El sustantivo modificado por la cláusula atributiva se llama antecedente. Las palabras que guían la cláusula atributiva son los pronombres relativos (ese, cual, quién, quién, etc.) y los adverbios relativos (cuándo, dónde, por qué, etc.). El pronombre relativo se refiere al sustantivo anterior y puede usarse como el. Sujeto u objeto en la cláusula atributiva y atributiva. Los adverbios relativos se pueden utilizar como adverbios en cláusulas atributivas para expresar tiempo, motivo, lugar, etc.
Conozco al hombre que está allí.
La novela que compraste es muy interesante.
Esa era la casa donde vivía.
Nunca me olvidaré