2. Querido maestro, gracias por tu gracia enriquecedora. Siempre recordaremos tu gracia enriquecedora.
3. Maestra, en mi corazoncito, aparte de mis padres, ¡lo más asombroso eres tú!
4. Maestro, tú eres la lluvia de primavera en nuestros corazones, y la lluvia y el rocío alimentan al mundo.
5. Me convertiré en un maestro glorioso en el futuro. A menudo tengo este sueño...