En aplicaciones que requieren alta resistencia, resistencia al desgaste y a la corrosión, las aleaciones de hierro son mejores; en aplicaciones que requieren bajo costo y facilidad de procesamiento y fabricación, el hierro puro es mejor.
El hierro es un elemento metálico con abundantes recursos terrestres. En la naturaleza, el hierro se presenta principalmente en forma de compuestos químicos, como el mineral de hierro. El hierro puro tiene excelentes propiedades, como baja densidad, alta conductividad eléctrica y es fácil de procesar y fabricar. El hierro puro es más adecuado en aplicaciones que requieren bajo costo y facilidad de procesamiento y fabricación.
Las aleaciones de hierro se forman aleando el hierro con otros elementos. Las aleaciones de hierro tienen mayor dureza y resistencia que el hierro puro. Esto permite que las aleaciones ferrosas presenten una mayor durabilidad y resistencia a la fatiga en muchas aplicaciones. Además, las aleaciones ferrosas también tienen mejor resistencia al desgaste y a la corrosión. Las aleaciones ferrosas son una mejor opción en aplicaciones que requieren alta resistencia, resistencia al desgaste y resistencia a la corrosión.