En primer lugar, puedes elegir algunas canciones infantiles sencillas y canciones infantiles como material de aprendizaje. Estas canciones suelen tener melodías sencillas y letras vívidas que atraen fácilmente la atención de los niños. A través del canto, los niños aprenden los conceptos básicos de ritmo y tono.
En segundo lugar, puedes elegir algo de música con acción y baile. Este tipo de música puede ayudar a los niños a comprender y expresar mejor el ritmo y la emoción de la música. Por ejemplo, puedes elegir música de baile infantil de ritmo rápido para que los niños bailen con la música y ejerciten su coordinación y flexibilidad.
Además, también podrás elegir música interpretada por algunos instrumentos musicales. Los niños de jardín de infantes pueden intentar utilizar instrumentos musicales sencillos, como panderetas y campanas, para seguir el ritmo de la música. Esto no solo puede cultivar la capacidad de percepción musical de los niños, sino también ejercitar su capacidad práctica y coordinación.
Finalmente, puedes elegir algo de música con historias y expresiones emocionales. Este tipo de música puede ayudar a los niños a comprender mejor la expresión emocional y las historias de la música. Por ejemplo, puede elegir música clásica de cuento de hadas para que los niños sientan la trama y las emociones de la historia a través de la música.