En segundo lugar, de hecho, muchos padres saben muy bien que se arrepienten de perder los estribos, por lo que debemos reconocer cómo generamos emociones, ya sea en el trabajo o en la vida, solucionamos los problemas fundamentales y, fundamentalmente, reducimos las oportunidades de exposición emocional;
En tercer lugar, comuníquese más con sus hijos y pase más tiempo con ellos. Cada niño es encantador y único en el corazón de sus padres.
Los padres son los primeros maestros de sus hijos, y sus palabras y acciones afectan directamente la calidad de sus hijos. Esto requiere que los padres den un buen ejemplo a sus hijos.