Si pudiera permitirme un cochero, ¿me casaría contigo? Me casaré con mi prima. Su marido, Jiang Sijiao, hizo esa broma. Yan Xin recordó esta frase toda su vida. Ella fue la elección indefensa de su marido y nunca mereció lo mejor. Para poder vivir una buena vida con él, Yan Xin le pidió que vendiera su dote más importante: una farmacia que su abuelo le había dejado especialmente, y ella apretó los dientes.
Cuando los rickshaws eran populares, cada familia tenía su propio coche y conductor. También quiere contratar gente y tener fácil acceso. Jiang Si dijo esto: Si puedo permitirme un conductor de carruaje, ¿me casaré contigo? Me casaré con mi prima. La implicación: no es que sea un incompetente y no tenga dinero, sino que tú no lo mereces. Yan Xin estaba confundido en ese momento. Pronto, su prima se fue a estudiar al extranjero.
Excelente introducción al capítulo
Yan Xin tiene mucho dinero. Su cuñada le sugirió comprar acciones, pero ella no se atrevió. Le pidió a Jiang Sijiao que lo llevara al banco HSBC para depositarlo. Tres años después, su hijo enfermó y ella quiso sacarlo, solo para enterarse de que Jiang Si le había enviado el dinero a su prima que estaba estudiando en el extranjero. Dijo: Es difícil para ella estar sola en el extranjero. Sólo quiero que su vida sea mejor.
Mi hijo está en el hospital y su vida o muerte es incierta. Yan Xin no estaba de humor para causarle problemas. Empeñó un juego de joyas de jade y cobró costosos gastos médicos del Hospital West. Medio mes después, su hijo fue dado de alta del hospital sin problemas. Jiang Sijiao también dijo: En la casa de una mujer, ¿a qué se debe todo este alboroto? Tomar algún medicamento es bueno para su hijo, gracias a sus antecedentes familiares. Al decir que había desperdiciado tanto dinero, Yan Xin tuvo la idea de divorciarse.