Donar o intercambiar
Donar libros usados a escuelas, bibliotecas comunitarias o organizaciones benéficas, o intercambiar libros que sus hijos necesiten con otros padres, lo que no solo puede transmitir conocimientos, sino también ayudar. los niños aprenden a amarlos y cuidarlos, a vivir con frugalidad.
Organiza y almacena en casa
Busca un buen lugar para los libros antiguos en casa, como una librería o estantería, y clasifícalos periódicamente. Esto no sólo puede mantener el interés de los niños por la lectura, sino también estimular hermosos recuerdos y emociones.
Convierte los residuos en tesoros
Recorta los patrones o palabras del libro y conviértelos en sobres, marcapáginas y otros pequeños objetos para sorprender a tus hijos. Al mismo tiempo, también se realiza la reutilización de residuos, lo que en realidad es matar dos pájaros de un tiro.
Disposición razonable
Podemos optar por desechar libros que no se puedan reutilizar. Pero antes de tirarlo a la basura, recuerda borrar toda la información privada. Esta también es una buena oportunidad para enseñar a los niños sobre la clasificación de residuos y la conciencia medioambiental.