En segundo lugar, la "educación temprana" es una lección esencial para los bebés. Algunos estudios en neurociencia han descubierto que las células cerebrales humanas tienen extraordinarias capacidades de proliferación. Si la estimulación ambiental es deficiente, muchas células del cerebro se desarrollan y dejan de crecer. Si la estimulación ambiental es suficiente, las células nerviosas se utilizarán por completo y se desarrollarán de manera más significativa. El cerebro del bebé es en realidad un sistema dinámico que sufre cambios sorprendentes a medida que cambia la cantidad de estimulación. La construcción y diferenciación del sistema nervioso depende de la estimulación ambiental del crecimiento temprano de los niños, es decir, la estimulación de la visión, el oído, el tacto, el equilibrio, el movimiento y el habla, la estimulación integral de las formas, colores, símbolos, sonidos, etc. Los estímulos ambientales son como una mano invisible, un diseñador potencial que moldea la microestructura del cerebro humano con su riqueza, especialmente el establecimiento de ramas dendríticas y vías de transmisión sináptica. La esencia del período crítico del desarrollo de la primera infancia es que el cerebro se encuentra en un período explosivo y cada área funcional del cerebro se encuentra en un período sensible para construir y diferenciar varios sistemas de procesamiento de información del cerebro. , como el sistema de procesamiento visual, el sistema de procesamiento auditivo y el sistema de procesamiento del habla, el sistema de procesamiento de movimiento, etc. , estrechamente relacionado con la complejidad de los estímulos ambientales en el desarrollo infantil temprano. La microestructura del cerebro humano no está fijada de forma innata, sino que se desarrolla gradualmente en el proceso de recibir diversos estímulos en la etapa inicial. Una buena estimulación ambiental y educativa puede cambiar fundamentalmente la microestructura del cerebro y el rendimiento cerebral general.
En tercer lugar, la educación infantil debe respetar la capacidad innata de aprendizaje del bebé. Desde el día en que nace, el bebé utiliza sus diversos órganos sensoriales y motores para ver, escuchar, hablar, oler y tocar constantemente. Está constantemente en movimiento, explorando, imitando y pensando. información del entorno. Todo tipo de estimulación, absorbe con entusiasmo toda la información del mundo exterior e internaliza esta información en nutrientes y ayuda a nutrir la propia mente y el comportamiento. Desde este punto de vista, un bebé comienza su carrera de "aprendizaje" nada más nacer, pero su modo de "aprendizaje" dista mucho del de nuestros adultos. Por lo tanto, los padres tienen la responsabilidad de respetar las características de "aprendizaje" de su bebé y brindarle un buen entorno de aprendizaje para que pueda utilizar plenamente su capacidad de "aprendizaje". No pueden utilizar la excusa de "dar libertad a los niños" o "dejar que los niños se desarrollen libremente" para privar al bebé del derecho a aprender disfrazado, ni pueden ejercer ciegamente una influencia poco realista sobre el bebé, independientemente de las características de desarrollo y personalidad del bebé. . Si cumplimos con las necesidades del bebé y respetamos sus características de desarrollo, una "educación temprana" adecuada promoverá el desarrollo del bebé y no limitará su imaginación y creatividad, ni provocará otros efectos adversos.