(1) Primera generación: Usamos notas y memorandos para registrar nuestras tareas y no olvidarlas, mientras asignamos tiempo y energía a nuestras apretadas agendas.
(2) La segunda generación: Énfasis en calendarios y horarios para planificar eventos futuros, reflejando así que la gestión del tiempo ha notado la importancia de planificar el futuro.
(3) La tercera generación: concepto de prioridad. Es decir, establecer objetivos a corto, mediano y largo plazo según prioridades, y luego hacer planes para alcanzarlos día a día, asignar tiempo y energía limitados y esforzarse por lograr la mayor eficiencia. Por ejemplo, el método de los cuatro cuadrantes. ?
(4) La cuarta generación: aboga por la gestión personal y se centra en cómo hacer las cosas. La diferencia con el pasado es que niega fundamentalmente el término "gestión del tiempo" y defiende que la clave no está en la gestión del tiempo, sino en la gestión personal. En lugar de centrarse en programar y organizar las cosas, concéntrese en mantener un equilibrio entre producción y capacidad.
Comprender el historial de desarrollo de la gestión del tiempo le ayudará a comprender el proceso de gestión del tiempo y en qué etapa se encuentra.