La moraleja de esta historia es: no hay nada más que apariencia; excepto oro y jade; abandonar la raíz y perseguir las últimas palabras;
Un general talló un hermoso arco, pero inesperadamente se rompió cuando tiró de él con fuerza. La historia se expresa en modismos.
Existe una antigua fábula griega sobre un joven cazador que heredó de sus padres un arco incomparable. Cazar con él provocaba celos en algunas personas. Entonces alguien le dijo: "Hermano, tu arco parece tan común. Deberías tallar algunos patrones y gráficos en él y luego aplicarle una capa de polvo de oro. Es muy brillante. ¡Eres un buen cazador!" El cazador se conmovió. Efectivamente, fue a la ciudad y contrató a un artesano para que tallara un arco en el suelo. Al día siguiente tomó su arco y se fue a cazar. Tan pronto como tiró de la cuerda, el arco se rompió.