La vida es como un grueso libro de filosofía. El contenido del libro es completo y colorido, y la vida no favorecerá a nadie, ya sea una persona común o una persona destacada. Pero las personas que saben vivir suelen estar cerca de la vida, y la vida les ha preparado un camino soleado. Y aquellos que están tristes y deprimidos entre semana son simplemente personas que escapan de la vida. Esas personas no prestan atención a la vida real y fantasean con el futuro todo el día. Como resultado, la vida los castiga. La vida no tiene vida y, hagas lo que hagas, te toparás con una pared a cada paso. Nunca debemos ser lo segundo, sino que debemos elegir lo primero, afrontar cada día con espíritu pleno y comprender que somos "probar" la vida en lugar de "soportarla". Cree que la vida te da más felicidad de la que pagas.
La vida es un puente, un puente largo y desafiante. Cada vez que cumplo un año siento que estoy dando un paso más hacia el otro lado del puente. ¿Qué hay sobre el puente? Infierno, cielo o algún cielo. Realmente no importa. Lo que importa son los altibajos que se experimentan al cruzar el puente. Estas cosas se conservan. Se ha convertido en una vida llena de alegría, tristeza y alegría.
Sólo hay una vida, por lo que esta única vida debe tener sentido.