Perspectiva cultural: en algunas culturas, es común que los hombres usen vestimenta formal. Por ejemplo, en Escocia, los hombres usan faldas tradicionales llamadas “kilts” en ocasiones especiales. En Oriente Medio y el sur de Asia, los hombres suelen llevar burkas.
Perspectiva histórica: Históricamente, era común que los hombres usaran falda. En la antigua Roma y Grecia, los hombres solían vestir túnicas o faldas cortas. Todavía en el siglo XVIII, los niños pequeños usaban vestidos.
Perspectiva de la moda: En los últimos años, cada vez más diseñadores de moda han comenzado a romper las normas de género y diseñar ropa adecuada tanto para hombres como para mujeres. Muchas marcas conocidas han lanzado colecciones neutrales en cuanto al género, que han recibido una respuesta abrumadora de los consumidores.
Perspectiva social: Si bien en algunas sociedades o comunidades, los hombres que usan vestimenta formal pueden causar confusión o incomprensión, una mayor comprensión de la igualdad y diversidad de género conducirá a una mayor aceptación de este comportamiento.
Punto de vista psicológico: Si un hombre quiere llevar una prenda de vestir y se siente feliz y cómodo haciéndolo, entonces tiene todo el derecho a hacerlo. Toda persona tiene derecho a expresar su identidad y personalidad.
En resumen, los hombres pueden vestir ropa formal, y esta elección debe ser respetada y aceptada.