Hubo un destacado poeta de la dinastía Ming de China. Es un funcionario íntegro que nunca saquea el dinero de la gente ni soborna a sus superiores. Se preocupaba profundamente por los sufrimientos de la gente de la zona y su gente lo amaba.
El viejo refrán dice bien: "La integridad puede unir a la gente y la autodisciplina puede convencerla". "La lucha contra la corrupción no es gran cosa y no debemos cultivarla". Hábitos honestos, cultivar pensamientos honestos y ser como una persona honesta como Yu Qian.