¿Cómo debemos educar a los gatos cuando cometen errores? Entrenamiento científico de gatos

Entrena científicamente a los gatos para corregir los malos hábitos.

1. Entrenar a los gatos para que no orinen en todas partes

Razones externas:

Sentir que la caja de arena está demasiado sucia;

La ubicación de la caja de arena Inadecuada;

La caja de arena es demasiado pequeña o muy pequeña;

No me gusta la arena para gatos actual;

Métodos de procesamiento:

1. Limpia la orinal una vez al mes y retira las heces a tiempo. 2. Elige arena para gatos con tofu sin perfume.

3. . Prepare comida para la caja de arena para gatos el doble que la de los gatos;

5. Preste atención al lugar donde el gato ha orinado, trátelo a tiempo, desodorícelo y evite volver a orinar en el mismo lugar. .

Motivos psicológicos:

El nuevo gato acaba de llegar a casa y tiene una reacción de estrés;

El gato se queda fuera y expresa descontento;

Es reprendido y luego venganza;

Este nuevo gato tiene un fuerte sentido del territorio.

Métodos de procesamiento:

1. Limpiar la orinal una vez al mes y palear las heces a tiempo.

2. Elija arena para gatos de tofu sin fragancia;

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3. Coloca la caja de arena en un lugar tranquilo o secreto;

4. Prepara el doble de comida que el gato en la caja de arena;

5. a la orina de gato Donde haya orinado, trátelo lo antes posible y desodorícelo para evitar volver a orinar en el mismo lugar.

2. Entrenar a los gatos para que no muerdan.

Razones externas:

No desarrollé buenos hábitos cuando era niño y a menudo molestaba al gato con mis manos.

Abofetea fuerte al gato para que se enfade.

Métodos de procesamiento:

1. No molestes al gato con las manos durante la lactancia.

2. Dale una bofetada al gato de forma adecuada. La cola del gato temblará mucho. Las orejas también te mirarán, así que detente rápidamente.

3. Cuando un gato te muerda, deja de jugar inmediatamente, aléjate y ignóralo.

4. Ten en cuenta que los gatos nunca muerden a las personas. Si de repente se ponen muy irritables, es posible que tengan celo o se sientan mal. Asegúrate de comprobar el estado físico del gato y envíalo a casa si es necesario.

3. Entrena al gato para que no haga parkour por la noche.

Para consumir la energía del gato durante el día, prepara un columpio para gatos o una cuerda para gatos colgada de la puerta.

Juega con tu gato durante aproximadamente una hora antes de acostarte, y prepara la comida antes de acostarte para evitar que se despierte con hambre en mitad de la noche.

No lo ignores cuando te despiertes por la noche, de lo contrario pensará que estás jugando con él.

4. Entrena al gato para que no tenga miedo de salir

Conserva la bolsa para gatos o la caja de aire para que el gato se familiarice con ella. No lo regañes ni lo fuerces (puedes ponerle bocadillos o juguetes).

En el coche o en la carretera, puedes hablarle suavemente a tu gato para relajarlo.

Después de salir, puedes premiar a tu gato con algunos snacks (snacks deliciosos y nutritivos, como liofilizados o tiras para gatos).

5. Entrena a los gatos para que no tengan miedo de los extraños.

Para generar confianza entre los gatos y las personas, no obligues a los gatos a hacer nada.

Cuando un extraño llegue a tu casa, hazle una señal para interactuar con el palo para gatos o las golosinas, pero no lo abraces ni lo toques por el momento.

Quédate siempre con el gato para que se sienta seguro.

Dejar los hábitos alimenticios de los gatos

Guarda los cachivaches (como agujas e hilos, medicamentos, objetos pequeños, etc.) que son perjudiciales para los gatos. ).

Puede carecer de oligoelementos y puede alimentarse con nutrientes elevados.

Tal vez porque me aburro muchísimo, puedo tomarme un tiempo para jugar con mi gato.

7. Entrena al gato para que se siente.

Coloca bocadillos delante del gato para atraer su atención. Los gatos levantarán la cabeza para buscar comida y, naturalmente, se sentarán.

Cuando el gato quiera sentarse, diga la orden "sentarse", recompénselo con bocadillos después de sentarse y repita el entrenamiento.

8. Entrena al gato para que le dé la mano.

Cuando el gato esté a cuatro patas, tira suavemente de la pata.

Dale la mano y dale bocadillos al mismo tiempo, de 3 a 4 veces al día, cada vez con una duración de unos 10 minutos. Repite durante unos días y podrás enseñarles a ponerse las manos sobre las manos.

9. Entrena a tu gato para que esté ahí cuando lo llames.

Cuando digas el nombre del gato, pronúncialo claramente, habla despacio y enfatiza la razón importante para que el gato sepa que lo estás llamando.

Cuando el gato coma o juegue con el gato, llámalo por su nombre varias veces para que asocie el nombre con cosas buenas.

Crea un sistema de incentivos

Recompensas táctiles

Toca tu cabeza, rasca tu barbilla, acaricia tu trasero.

¡Nunca toques el vientre, las patas, las patas o la cola del gato! El gato se ofenderá.

Pasos para lamer a un gato: rascarle la barbilla, tocarle la cabeza, masajearle el lomo y acariciarle la base de la cola harán que el gato se sienta cómodo.

Recompensas en snacks: liofilizados, tiras para gatos, comida enlatada, etc.

Establecer un mecanismo de castigo

Los gatos deben ser castigados si hacen algo mal, pero no deben ser demasiado agresivos, de lo contrario provocarán represalias.

Qué puedes hacer: sujetar la nuca del gato; tratarlo con frialdad e ignorarlo, mirarlo a los ojos y decirle que no.

Cosas que no se deben hacer: Golpear al gato, maldecir al gato, esconderlo y sacarlo a rastras.

Nota: No utilices directamente la educación sobre conducta agresiva, ya que esto puede provocar que el gato acumule estrés psicológico y pueda extenderse a otros problemas de conducta.