Hay muchas ramas evolutivas de los simios, incluidos los chimpancés modernos y los humanos, el Gigantopithecus es otra. Sólo se han encontrado entre mil y dos mil dientes y algunos fósiles de mandíbulas de grandes simios, incluidos enormes dientes caninos. Con base en la estructura de la mandíbula, se especula que la fuerza de mordida del simio gigante es muy fuerte y puede ser tan fácil morder ramas como nuestros palillos, y los simios tienen grandes similitudes en la estructura ósea. Por lo tanto, podemos calcular el tamaño de los simios comparando las proporciones de las mandíbulas de los simios modernos con sus cuerpos, basándose en el volumen de las mandíbulas.
Se especula que el gran simio macho puede alcanzar unos 3 metros, pesar más de 540 kilogramos, y el peso promedio puede llegar a más de 200 kilogramos. Además es una especie que puede caminar erguido por un corto tiempo. tiempo, lo cual es muy extraño. Por tanto, se les puede considerar una especie entre humanos y simios, similar a algunos de los gorilas actuales, pero aún mantienen algunos hábitos primitivos, como vivir en cuevas y otros lugares más elevados. Aunque tienen dientes afilados parecidos a caninos, los simios gigantes no comen carne y se ganan la vida recogiendo frutas y comiendo hojas. Esto también demuestra que necesitan mucho tiempo para comer hierba al día, lo que puede resultar difícil para su inteligencia. para desarrollarse bien y son demasiado pesados, no puedo trepar al árbol.
En la actualidad se han descubierto 8 fósiles de grandes simios en el mundo, 6 en China, 1 en Vietnam y 1 en la India. Por la distribución geográfica se puede ver que la mayoría de ellos viven en zonas de clima más cálido. La restauración del modelo también descubrió las características de los grandes simios que se adaptan al pelo tropical. Debido a su estructura fisiológica para caminar erguido, algunas personas alguna vez pensaron que eran una rama más cercana a los humanos en la historia de la evolución, pero ahora esta opinión está disminuyendo gradualmente.
No hay duda de la fuerza de los simios gigantes, de lo contrario sus enormes cuerpos no serían capaces de sostenerlos. Sin embargo, basándonos en el estudio de los fósiles, también podemos encontrar que su esófago era relativamente estrecho, y su tamaño les obligaba a recoger una gran cantidad de frutas para comer, por lo que eran más susceptibles a los cambios ambientales. Además, vivieron en una edad de hielo cuando el clima cambió de cálido a frío, y la superficie de cobertura de plantas y la producción de alimentos como frutas también disminuyó, lo que llevó a su crisis de extinción.
Los resultados de la investigación también muestran que los humanos han convivido con este simio gigante durante un período de tiempo y no amenazan la vida humana. Presumiblemente, los humanos recolectaban frutas para complementar la caza y el consumo de carne, utilizando fuego. También es posible que los grandes simios eventualmente se extingan debido a la competencia de los humanos.
Al menos hasta el momento no hemos encontrado ningún simio vivo relacionado con el Gigantopithecus, por lo que pensamos que están completamente extintos. Otra teoría es que el gran simio también experimentó un período de rápida evolución y desarrollo cerebral, pero debido a que el cráneo era demasiado grueso y duro, restringió el desarrollo del cerebro y se asfixió.