Métodos y pasos para conservar las piñas

1. Elimina las impurezas de las piñas, incluidas las semillas, el musgo y las agujas de pino. Al limpiar, puedes utilizar unas pinzas o un cepillo. Cuanto más meticulosa sea la limpieza, mejor el remojo dará como resultado piñas más limpias.

2. Mezcla 2 partes de agua y 1 parte de vinagre blanco en el lavabo, bañera o cubo. La cantidad final de agua y vinagre blanco viene determinada por el número de piñas y el tamaño del recipiente.

3. Remojar las piñas durante 20 a 30 minutos. Las piñas deben quedar completamente sumergidas en el líquido. Si flotan, pese las piñas con una toalla pesada y húmeda, una tapa de olla o un plato. El remojo puede hacer que las escamas partidas de la piña se cierren nuevamente. No te preocupes, las escamas se abrirán nuevamente después de que la piña se seque.

4. Coge las piñas y colócalas sobre el periódico para que se sequen durante la noche. Elija un área bien ventilada para secar las piñas. Si no tienes periódico, también puedes esparcir las piñas sobre una bolsa de papel o una toalla vieja.