El primer paso es crear un mapa mental. El mapa mental es una herramienta gráfica que puede ayudarnos a clasificar una gran cantidad de información y formar un proceso de pensamiento claro. Al construir un mapa mental, podemos ver la correlación y distribución de la información con mayor claridad, lo que facilita la comprensión de los puntos clave y los puntos clave de la información.
La segunda es hacer un cuadro resumen. Las tablas de resumen son una forma de información integrada que puede clasificar, resumir y comparar información para hacerla más sistemática y fácil de entender. Al hacer tablas de resumen, podemos comprender mejor las conexiones y diferencias entre la información y obtener información importante más rápido.
La tercera es utilizar etiquetas de clasificación. Las etiquetas de clasificación son una forma de etiquetar información. Al establecer palabras clave o etiquetas, la información se puede clasificar y resumir de manera efectiva. De esta forma, cuando necesitamos encontrar un determinado tipo de información, solo necesitamos buscar debajo de la etiqueta correspondiente para encontrar la información requerida más rápido.
El cuarto es afinar las palabras clave. Extraer palabras clave es una forma de filtrar información, lo que puede ayudarnos a reducir una gran cantidad de información a palabras clave para comprender y aplicar mejor la información. Al refinar las palabras clave, podemos comprender rápidamente el contenido principal y los puntos clave de la información, lo que nos ayuda a dominar y aplicar la información más rápidamente.