El discurso de Gettysburg - Abraham Lincoln (Este es el discurso que Lincoln pronunció en la ceremonia de dedicación del cementerio conmemorativo de Gettysburg el 11 de febrero de 1861. Está reconocido como el discurso más alto en inglés. Modelo.) Ochenta- Hace siete años, nuestros antepasados establecieron un nuevo país en este continente.
Este país se basa en el ideal de libertad y el principio de que todos los hombres son creados iguales. Actualmente estamos inmersos en una gran guerra civil. Esta guerra es una prueba de si nuestra nación, o cualquier nación que comparta sus ideales y objetivos, puede sobrevivir por mucho tiempo. Ahora nos reunimos -en uno de los grandes campos de batalla de esa guerra- para dedicar una pequeña porción de ese campo, como lugar de descanso final para aquellos que dieron sus vidas para que esa nación pudiera vivir. Es totalmente apropiado y apropiado que hagamos esto. Pero, en un sentido más profundo, no podemos dedicar ni consagrar este terreno, no podemos consagrar este terreno. Porque los valientes, vivos y muertos, que han luchado aquí han hecho esta tierra tan santa que nuestro poco poder ya no es suficiente para reprimirla. Quizás el mundo no se dé cuenta ni recuerde lo que digo hoy aquí, pero las hazañas de estos héroes nunca serán olvidadas. Lo que deberíamos hacer los recién llegados es dedicarnos al trabajo por el que los héroes lucharon e impulsaron pero que aún no han completado. Deberíamos dedicarnos a la gran tarea que nos han legado. Nuestros mártires han dado toda su sinceridad a nuestra causa. Debemos sacar más fuerza espiritual de sus ejemplos y estar decididos a evitar que su sangre sea derramada en vano. Bajo la protección de Dios, nuestra nación tendrá una nueva vida de libertad. Nuestro gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo perdurará para siempre.