Los patinetes de baja velocidad para personas mayores son pequeños vehículos eléctricos con una velocidad inferior a 60 metros por hora. Los más habituales en el mercado son de unos 40 metros por hora. Aunque aún no se ha incluido en el ámbito de gestión de "Empresas manufactureras y anuncios de productos" de "Vehículos de motor de carretera", los departamentos nacionales pertinentes están estudiando y formulando políticas y normas de gestión.
Los scooters para personas mayores se han desarrollado a un ritmo lento. No existe una prohibición explícita de su producción y venta, y no existen normas pertinentes que permitan a las empresas y a los propietarios aprovechar un vacío legal. vehículos pero son El volante tiene cuatro ruedas y tiene la misma forma que un automóvil. No es un vehículo no motorizado. Excede el límite de velocidad, el límite de peso y el límite de tamaño. y la mayoría de las zonas urbanas los han prohibido.
La mayoría de las personas que utilizan scooters para personas mayores no tienen permiso de conducir y tienen un conocimiento relativamente débil de la seguridad vial. Los conductores se saltan sin motivo los semáforos en rojo, conducen en la dirección equivocada y conducen en sentido contrario. carril, lo que afecta gravemente el orden del tráfico y el factor de peligro para la seguridad es alto.
Los scooters para personas mayores son baratos y muy apreciados por las personas mayores. Sin embargo, detrás de su bajo costo se esconde una tecnología de fabricación de automóviles deficiente. Parecen automóviles, sin bolsas de aire, algunos sin cinturones de seguridad y sin sistemas de estabilización del cuerpo. Se puede decir que es solo un cobertizo de metal, lo cual no es seguro.
Inicialmente, este tipo de vehículos estaba permitido para su uso en espacios cerrados como fábricas, parques y áreas de juego, y no podían circular por la carretera. Más tarde, algunas personas mayores de mediana edad y mayores compraron scooters y los condujeron directamente por la carretera. Con el tiempo, se convirtió en una tendencia en todo el país. La política nunca ha permitido explícitamente que tales modelos se pongan en circulación, pero tampoco se ha prohibido explícitamente, por lo que se ha formado un área en blanco.
Se recomienda que si desea que dichos vehículos circulen por la carretera, debe obtener una matrícula, comprar un seguro y obtener una licencia de conducir especial. Estos son los requisitos estrictos para la gestión. Teniendo en cuenta que las personas que utilizan este tipo de vehículos pueden ser personas mayores o incluso discapacitadas físicamente, la obtención obligatoria de un permiso de conducir puede reducir considerablemente el tamaño del mercado y causarles dificultades para viajar. Por lo tanto, sólo mediante la formulación de un sistema de gestión eficaz correspondiente podremos tener un futuro para los scooters para personas mayores.