La belleza y la sublimidad son dos categorías clásicas opuestas pero correspondientes en la estética occidental, y también son dos manifestaciones típicas de la belleza. La belleza brinda a las personas un placer estético refrescante, como el hermoso viento y el sol, el canto y el baile, el canto de los pájaros y la fragancia de las flores, brinda a las personas un poder infinito y sentimientos impactantes, como tormentas, olas tormentosas y espadas afiladas.
La elegancia se refiere a la elegancia, suavidad y armonía del arte o de las cosas en forma, color, estructura, ritmo, temperamento, etc. Tiene un alto valor estético y permite a las personas disfrutar de la belleza. Las cosas bellas hacen que la gente se sienta feliz, cómoda, relajada y feliz, y la belleza es el valor principal. En general, la elegancia se centra en el campo estético del arte, enfatizando la forma y la belleza, mientras que la sublimidad se aplica más a otros campos, enfatizando la reverencia y el asombro por el significado, el valor y las emociones humanas.
Introducción a Zhu Guangqian:
Zhu Guangqian (1930-2015) fue un famoso escritor y ensayista chino. Mi hogar ancestral es Yangguo, Anhui, y nací en la ciudad de Jianglang (ahora ciudad de Suzhou, provincia de Jiangsu). Es una de las figuras importantes en el campo de la cultura y la literatura chinas contemporáneas. Se le conoce como el "padre de la prosa" y se le considera una figura representativa de la nueva prosa china. Zhu Guangqian estudió en la Universidad de Nanjing, la Universidad del Sudeste y la Universidad de Columbia en los Estados Unidos en sus primeros años. Posteriormente se desempeñó como profesor del Departamento de Chino de la Universidad de Pekín, editor en jefe de "Selected Poems" y presidente de la. Asociación de Escritores Chinos.
Sus obras en prosa son fluidas y naturales, inteligentemente concebidas, muestran la profundidad de la vida cotidiana y la naturaleza humana desde una perspectiva delicada y profunda, y han tenido una importante influencia en el desarrollo de la prosa china moderna. Sus obras representativas incluyen "El camino a mi ciudad natal", "Árboles y piedras", "Diez cosas que los chinos hacen con frecuencia", "Susurros en el mercado", "Rechazar la comida", etc. Sus historias y obras en prosa tuvieron un profundo impacto en los lectores y todavía hoy son ampliamente leídas y elogiadas.