Si no tienes deficiencia de calcio no lo tomes. Si tiene deficiencia después del diagnóstico profesional, tómelo bajo la supervisión de un médico profesional. No se puede confiar en los médicos que venden medicamentos. Algunas clínicas pequeñas no lo cobran. Lo más seguro es ingerir alimentos complementarios.
La ingesta excesiva de calcio puede interferir con la absorción y utilización de otros oligoelementos y también puede provocar un mayor riesgo de padecer cálculos renales. En otras palabras, cuanto mayor sea la ingesta de nutrientes, no es mejor. La falta de nutrientes no es buena para la salud y una ingesta excesiva también puede ser perjudicial para la salud. En general, mediante una dieta equilibrada y una mayor ingesta de productos lácteos, básicamente se puede satisfacer la demanda de calcio del organismo. Por lo tanto, más suplementos de calcio no siempre son mejores.
Lo más seguro son los complementos alimenticios. Los alimentos ricos en calcio incluyen: piel de camarón, algas marinas, algas, pescado crujiente, ostras, algas, pasta de sésamo, etc. La sopa de huesos de animales también es rica en calcio, pero se debe agregar vinagre al cocinar para promover la disolución y absorción del calcio.