Primero: Utilizar los utensilios de cocina con precaución. Incluso los adultos que llevan más de diez años cocinando pueden lesionarse en la cocina, y mucho menos los estudiantes de primaria. Es muy importante enseñarles a utilizar los utensilios de cocina y a utilizarlos con cuidado. Especialmente al cortar verduras con un cuchillo, las verduras un poco más pequeñas o más suaves pueden deslizarse entre los dedos, por lo que cortar con un cuchillo afilado es muy doloroso de imaginar.
Dos: Ten cuidado al utilizar electricidad y gas. Además de tener cuidado con los cuchillos, también hay que tener mucho cuidado con la electricidad y el gas a la hora de cocinar. Una leve operación incorrecta puede causar peligro fatal. Por ejemplo, cuando se utilizan aparatos eléctricos, el enchufe no debe exponerse al agua y debe revisarse antes de su uso. Si utilizas gas natural para cocinar, debes controlar el calor, apagar el fuego y cerrar la válvula tan pronto como los alimentos estén cocidos, de lo contrario la fuga de gas será peligrosa.
Tres: Hacer comida frita para evitar que se salpique. Normalmente preferimos comer comida frita, pero el proceso de freír los alimentos también es muy peligroso. Al fin y al cabo, salpicarnos las manos con aceite caliente nos hará perder una capa de piel, así que ten cuidado al freír. A la hora de cocinar todos sabemos que primero debemos poner el aceite, y luego debemos controlar el agua al poner otras verduras, de lo contrario el agua salpicará por todos lados al encontrarse con el aceite.
Dejar que los niños aprendan a cocinar no sólo los hará más independientes, sino que también les permitirá cuidarse mejor en el futuro. Lo importante es tener cuidado y protegerse durante el proceso de aprendizaje.