¡Los profesores son muy buenos y el ambiente y las instalaciones también son buenos!
El transporte también es muy conveniente.
Los intereses privados tienen sus propias ventajas y hay muchas cosas que las escuelas públicas no pueden igualar, especialmente el equipamiento.
Y los profesores tampoco son malos.
A los profesores de las escuelas públicas les gusta recuperar las clases y no importa cuándo terminan las clases.
Los colegios privados tienen clases por horas, y si tienes que recuperar clases, serán fuera del colegio, lo que te hace sentir un poco independiente.